Una de esas tardes de febrero en las que no hay mucho que hacer, recibo de repente un e-mail nervioso de uno de mis ex-alumnos, Jesús, un chaval que apalea la batería con bastante mala baba: 'hey tío, que este finde tocamos en Madrid'. Y eso de Madrid, a los de pueblo aún nos impone… 'si estás por ahí, acércate a vernos'. Bueno, pues ¿por qué no? A veces es bueno escuchar a gente que todavía cree en la música, sin más. Y es que, como me dijera una vez Carlos, el bajista del grupo: 'joder, si cuando tenga tu edad puedo contarle a mis hijos que una vez toque en una banda, para mí ya ha merecido la pena'. Evidentemente, no pude por menos que contestarle que ni yo todavía soy tan mayor, ni todavía está probado que él pueda tenerlos.

Lokus Dei
A estos chiquillos les tengo un cariño especial. Les he oído ensayar durante dos años hora tras hora, tarde tras tarde, en un cuartillo cedido por el ayuntamiento del pueblo, con una batería parcheada, unos micros fiados y un par de narices. Y a ellos, jevis como pocos, los he visto tocar con sus 15 años con más miedo que vergüenza abriendo un festival de punk donde las cosas les salieron bastante mal… Y al día siguiente los he vuelto a oír ensayar con más rabia que nunca. Y un año después, los he visto volver al mismo festival y comerse el escenario. Y por eso sentí también algo especial cuando vi aparecer a Olmo a la puerta de la sala, el cantante, con unas X en el envés de la mano, a Eduardo, uno de los guitarras, con una falda en plan Ensiferum, y a Willy, el otro guitarra, dando saltos sin parar quieto ni un segundo.

Sé que me podréis decir que esto no es ninguna historia excepcional. Tampoco pretende serlo. Es solamente una intro que me ha salido un tanto larga. Porque a lo que yo iba, es a que al final fuimos a verlos. Tocaban en la sala Wind junto con otras 14 bandas en una de esas sesiones light para menores de 18 que cada vez proliferan más. Gracias a la deferencia de la gente de la puerta, pudimos entrar a verlos. A eso, y a los 10€ que nos cobraron, lo que nos pareció un tanto abusivo por un par de refrescos.
Por lo demás, como ya avanzo en el título, no hay que temer por el futuro de la parte más bruta del rock hecho aquí (aunque en muchos casos, cantado en inglés). Tanto los grupos, que sólo disponen de una oportunidad por ronda, como el jovencísimo público presente, lo dan todo desde el primer acorde. Y eso que el sonido deja bastante que desear, y no por culpa de los chicos, en muchos casos.

Nada más, suerte para todas estas jóvenes bandas, que esperemos que no pierdan la ilusión por la música y que pronto se den cuenta que para ser rockero no hace falta disfrazarse como una rockstar de videoclip.
Y, si se me permite, mucha suerte para LOKUS DEI, que, por cierto, pasaron a la semifinal.

FROM HELL

Muertos by Lokus Dei


Gracias por compartir:

Comenta por favor!

2 comentarios hasta ahora. Añade el tuyo

  1. Dios, que bonito joder...

    ResponderEliminar
  2. hola soy Jesús, de parte de todo el grupo y en especial mía , me has emocionado. me alegro que te gustase y es cierto que cada vez hay menos gente que siente la música. espero que sigas teniendo la camiseta jajaja y desde aquí te echamos de menos. Por cierto, este es mi blog de fotografía

    ResponderEliminar