Cuenta Noel Gallagher que la canción Some might say, primer single de un álbum histórico para la música, What's The Story (Morning Glory) (1995), fue la primera que escribió al mudarse a Londres, y que no tenía la más mínima duda de que llegaría a ser número uno. Según él, es la canción que mejor define el sonido y la música de Oasis. Ahí es nada. Claro que también la definió como '...el Gin-Tonic sacando lo mejor de mí'.
Todo ello forma un compendio del universo Oasis: leyenda, arrogancia, éxito, mucho alcohol y muy buenas canciones. Parece mentira que con el historial de peleas, desplantes, malos modos, idas y venidas, una banda como esta fuera capaz de hacer canciones como las que hicieron en los 90. Canciones que además tenían y conseguían la difícil tarea de poner en sintonía a los macarras de Liam y Noel y que durante el tiempo que durara la canción, la calma y la melodía gobernara el barco. Para desatar la tempestad una vez acabada la misma.
Una de las grandes virtudes de las canciones, para lo bueno y para lo malo, son esas asociaciones que de manera automática se producen en tu cabeza cuando las escuchas. Asociaciones con personas, momentos, sensaciones... que hacen que no podamos dejar de escucharlas. Y durante el tiempo que dura esa canción aparcamos cualquier conversación para cantarla, dejamos lo que estemos haciendo, y como si se tratara de un ritual, unimos voces, cruzamos miradas, bailamos o tocamos guitarras hechas de aire y ese se convierte en uno de esos momentos especiales.
Momentos evocados por canciones pero que van más allá de ellas. No hace falta decir nada cuando con los ojos se dice todo.
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| Oasis en los 90 |
Con Oasis a mí me pasa eso. Siempre hay una persona a la que busco con la mirada instintivamente cuando suena cualquiera de sus canciones. Esté cerca o no lo esté. Me sé de memoria la cara de esa persona cantando Don't look back in anger o Wonderwall, miles de veces compartidas en bares, conciertos, coches, jams guitarreras, a capella... desde que empezamos a hacerlo, hace ya varias vidas.
La semana pasada algo cambió para siempre en su vida e incluso a mí me cuesta asumir el típico "the show must go on", a pesar de que mi particular "show" de vivir y contar música tuviera que continuar quizá demasiado pronto.
Esta Canción de la Semana va dedicada a esa persona con todo nuestro cariño y el deseo de que los días poco a poco vayan siendo más brillantes.
kboy
Some might say by Oasis
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