Quién no ha dicho alguna vez, “a estos yo los escuchaba antes de que fueran conocidos”?
Quién no ha dicho alguna vez, “yo no voy a ver bandas de niñatos”?
Quién no ha dicho alguna vez, “estos son carne de festival”?
Quién se atreve a reconocer que ha mentido la mitad de veces?
Es cierto (esta vez), que a estos yo los escuchaba antes de que nadie supiera cómo se llamaban, desde esa primera maqueta donde me quedé colgada de OCB. Lo de las bandas de niñatos... Qué decir? A mí me gustan los niñatos, estoy en plena crisis de los 30, todo lo que suene a niñato me va. Y qué decir de mi compañero de cervezas esa noche? Su apodo es ese: Niñato. Y que sí, que por más que pase el tiempo, por más que la vida nos de algún meneo, por más que lleves mil escenarios o 102 como sumaban en esta gira los conciertos, por más que tu sonido haya prosperado tantísimo desde la última vez que los vimos, queremos seguir siendo un poco niñatos. Y la carne de festival nos va, y la de Festivaleros! también.
La apuesta no era fácil, nada más y nada menos que 27 temas del tirón, empezando por Santacruz y acabando con En mis venas. En algún momento se nos hizo bola. Había temas que hubiéramos alargado, algunos que se pegaban demasiado entre ellos y los acústicos nos dejaron a medias las ganas de reventar la garganta. Y un pero más, eché de menos a la banda, estaban ahí y tocan de lujo, pero eché de menos ver como disfrutaban con el público, quizás el cansancio de una gira apretada en fechas, quizás es que Chino es mucho Chino, no lo sé, pero ahí lo dejo.
Todo lo demás fue disfrutar. Tienen temazos, letras que remueven, una buena puesta en escena, un montaje de luces sencillo y efectivo. Cada vez tienen más claro su sonido y son muy músicos. Si tengo que elegir me quedo con OCB y Niebla, además de con el final apoteósico que enlazó Supersubmarina, Tecnicolor, Elástica, Puta vida y En mis venas.
Hay ganas de nuevo disco, el tercero siempre es decisivo, es una dirección u otra. No me atrevo a vaticinar qué va a pasar, aunque cruzo los dedos para que reencuentren a Ana, se den una vuelta por Graná y los atrape una Ola de calor, pero claro qué se yo de esto, si a mí me gustan las bandas de niñatos.
Lo que sí tengo claro es que tienen un público fiel, quince días antes twitter ardía en busca de reventas y en la sala no cabía un alfiler. Así que, queridos Bichos, seguid dejando muy alto el pabellón.
L y Pauin
PD. Para la sala: a los niñatos, en Valencia, las birras a tres euros, como que no…
Las fotos del concierto las podéis ver aquí
Comenta por favor!
Hay 0 comentarios hasta ahora. Añade algo ;)