Shing02

Uno de los aspectos más bonitos de la música y, por ende, de cualquier disciplina artística es la capacidad de crear algo nuevo de dos elementos aparentemente muy distintos. Se trata de un proceso casi mágico o, como lo llamaban en la edad media, de alquimia. Dos corrientes distantes confluyen en un mismo lugar y se transforman en algo nuevo, con vida e identidad propia. Hace muy poco he descubierto una de esas mezclas que hacen que la música sepa tan bien. El artista en concreto es un rapero japonés, se llama Shing02, y la canción 'Wankyoku'.

Un momento... ¿has dicho rap japonés? Sí, eso he dicho.

De hecho (y tras investigar en la Wikipedia, que uno es friki pero no tanto) el hip-hop es un movimiento bastante amplio en el país del sol naciente, con la irrupción del break-dance a finales de los años 80. Si no habéis visto a los japoneses bailar, sabed que se les da muy bien. Desde ahí a grandes artistas consagrados como DJ Krush, o DJ Kentaro, el abanico crece hasta una amplitud inesperada. Mientras escribo este artículo estoy escuchando distintas bandas, y os cuento que, si sois un poco frikimusicales como yo, merece la pena el ejercicio. Abrid los oídos y curiosead.

Shing02, WankyokuPero vamos con el tema en cuestión. 'Wankyoku' me llamó la atención especialmente, tras un rato escuchando los álbumes de Shing02 que podemos encontrar en Spotify. Se trata de una canción sencilla en estructura, lírica, y rica en influencias diferentes. Sólo el artista sabe de dónde las sacó, pero hay ratos que me recuerdan al ambient de grupos como Zero 7. Todo ello mezclado con los ritmos típicos del hip-hop, rapeo en japonés, y varias voces haciendo juego.

Aunque, como el buen alquimista, no se detiene tras la primera pócima. Otras canciones también me han llamado la atención, como 'Edo Funk', y sus ritmos ragga, la mecánica de '400' o 'Battlecry', elegida para el opening de la serie de anime Samurai Champloo ,y que otorgó gran fama al DJ y productor.

Las mezclas son inesperadas, pero rara vez son producto de la casualidad. Shingo Annen, el nombre real del productor y rapero japonés, es lo que se llama un ciudadano de mundo. Tras vivir en Tanzania, Londres y San Francisco, vuelve a asentarse en Japón, pero trayendo en su maleta multitud de referencias de aquí y de allá. Además de aportarle una rica base para sus mezclas, le ha permitido rapear en inglés y japonés con soltura. La alquimia, una vez más. Sin duda, la mayor riqueza de nuestro tiempo.

Miguel Buendía


Wankyoku by Shing02
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