-Pero tío AJ! que hace cuánto que no ves a Defcondos?
-Buah, ni se sabe...
-Pues ya estás zumbando para Guada el sábado por la noche...
-Joder pues molaría, a ver si puedo cuadrarlo..
-Otra birra?
-Claro!
Así de inocente, y por otra parte recurrente, se gestó lo que se convertiría en una noche inolvidable para nuestro nuevo colaborador AJ y para mí mismo.
Siempre me gustaron DCD por la música y por el rollo combativo y de no dejar títere con cabeza que les caracteriza. A ratos aún me siento Def y me gustaría quemar el Liceo o jugar con objetos punzantes.
Me acuerdo de lo que decía Cesar Strawberry, la voz aguda, cuando volvieron en 2004 después de 5 años de parón: 'Cuando nos separamos, dejamos un hueco que nadie parece haber llenado en estos años'
Y hoy, después de 20 años luchando contra la estupidez militante y la ultramemia que nos rodea, igual que siempre, DCD siguen siendo necesarios... (kboy)
Desplazarse tres horas en coche para el concierto de un único grupo es un acto de fe y esperanza que incluye mucha ilusión y por supuesto ganas de disfrutar.
La sala Óxido de Guadalajara acogió en
esta ocasión a los siempre chocantes y aguerridos Def Con Dos, en su gira 20
Aniversario, y con dos teloneros King Álvarez y DKuajo muy animados, que con un
buen calentamiento y muchas ganas, a pesar del poco aforo inicial, dieron la
talla.
Las luces se apagan, las voces
graves-medias-agudas comienzan, la gente se emociona, y salta a la palestra mi
niñez. Este grupo que marcó una parte de mi adolescencia, y que por desgracia
la gran mayoría de los que actualmente tienen esa edad ni han conocido, conocen
o lo harán.
Esta familia que me hizo aprender tantas
palabras, y que a diferencia de muchos de su estilo o de simplemente rap,
rezuman cultura por los cuatro costados, se esté o no de acuerdo con sus ideas,
su música y letra es como una lección dada por los mejores maestros.
Todavía me recuerdo preguntándole a mi
padre que significaba la frase 'en las cuatro esquinas que tiene mi cama tengo cuatro
chaperos montando guardia'...qué inocencia.
Era mi primera visita a esta sala, no sé
decir si es algo habitual, o únicamente en esta ocasión, pero la ecualización
de la misma era tan mala, que gracias a que las letras me salían solas de la
boca, si no la decepción hubiera sido terrible, apenas se entendía nada, y en
cuanto sonaba la guitarra, los micros prácticamente se distorsionaban.
J Al Andalus |
El flashback a temas antiguos, un par de
ellos de los últimos discos, y el popurrí que da fin al concierto, cierra una
actuación soberbia, con un público, que quizás no estuvo al nivel del grupo.
Comenta por favor!
Hay 0 comentarios hasta ahora. Añade algo ;)